A ‘OSAMA’ LO ASESINARON A PIEDRA EN TULUÁ

La calle siempre hizo parte de su vida y en ella murió en manos de antisociales.

‘Osama’, un habitante de la calle radicado en Tuluá

Hace 8 años Jhon Jairo Molina Maya nunca imaginó quedarse en  Tuluá, y menos que se convertiría en habitante de la calle; pues de un entusiasta joven aprendiz de teatro y participe siempre de festivales culturales de su natal Sevilla valle,  pasó a ser un alcohólico y posteriormente consumidor de alucinógenos.

Esta persona que se granjeo el cariño de muchos de los comerciantes del sector de la galería de Tuluá,  fue hallado muerto a las 3:00 de la tarde en la parte de atrás de la Terminal de Transporte de la Villa de Céspedes, su cuerpo yacía bajo el inminente sol y mientras las personas se acercaban a curiosear, sus rostros reflejaban pesar por lo ocurrido y el hecho de  la intolerancia para con el vagabundo,  y el desprecio por los seres que cometieron este atroz crimen.

Por cada paso que daban se aterrorizaban más y más, y no era para menos, pues su cabeza estaba destrozada por los múltiples golpes que le propinaron con piedras.

De los responsables de este crimen que deja en luto a una ciudad entera dado que John Jairo de 32 años, el famoso ‘Osama’ del sector de la Galería y la Terminal de Transportes era muy conocido y querido.

A su corta edad fue funcionario de la alcaldía del municipio de Sevilla de donde era oriundo, allí trabajó en el departamento de Arte y Cultura lo que le permitió participar en el Festival Bandola, hace 8 años apasionado por el periodismo, decidió arribar a Tuluá,  tomaron la decisión su familia oriunda del cafetero municipio de Sevilla, de mandar a los muchachos a estudiar a Tuluá y con él,  cada ocho días viajaba su también hermano Cesar Augusto quien se capacito en Medios Audiovisuales y logró un puesto en la emisora Radio Reloj de la época y posteriormente viajó a las emisoras de Jorge Barón en Bogotá, de Jhon Jairo se conoció que estudio un  par de meses en  la distinguida Academia Comunicar y también alcanzó a estudiar algunos semestres de administración en la UCEVA, pero el flagelo de la droga y el licor lo apartaron de ambas capacitaciones .

Pero a pesar de su pasión por los medios de comunicación, nunca dejó de hacer teatro pero en las calles de la Villa de Céspedes, las mismas que en la actualidad están teñidas por la sangre de las víctimas de los sicarios, se fue perdiendo y consumiendo por los vicios.
‘Osama’ fue reconocido en el sector de la Galería porque constantemente se pintaba y en medio de risas y chanzas con los comerciantes del sector, recordaba sus tiempos de gloria con el teatro. Ese actor callejero, gestor cultural, buen hombre e hijo, nunca le hizo daño a nadie y por el contrario, alegraba el día con su particular locura y risas que lo llevaron hacer parte de Tuluá, uno de los personajes típicos.